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THE UPLIFT MOJO PARTY PLAN (Red Hot Chili Peppers, 1987)

Artista: Red Hot Chili Peppers (C)

Fecha de Grabación: May del ‘87

Fecha de Lanzamiento: 29 de Septiembre de 1987

Discográfica: EMI

Productor: Michael Beinhorn

Calificación: 7

Era: Los Nebulosos 80's (1980-1989)

Subgénero: Alternativo

Mejor Canción: Behind the Sun

Canciones: 1) Fight Like a Brave; 2) Funky Crime; 3) Me and My Friends; 4) Backwoods; 5) Skinny Sweaty Man; 6) Behind the Sun; 7) Subterranean Homesick Blues; 8) Special Secret Song Inside; 9) No Chump Love Sucker; 10) Walkin' on Down the Road; 11) Love Trilogy; 12) Organic Anti-Beat Box Band.

 

Bienvenidos a ésta, su serie favorita de la TV, “The Red Hot Chili Peppers, 80’s Edition”, con el inicio de su tercer temporada, titulada “The Uplift Mojo Party Plan”, llena de risas, momentos irreverentes y una que otra lágrima.

Ya en serio, con semejante título de disco, uno hubiera esperado una guarrada aun mayor que sus primeros dos. Pero no. No es que sea una joya incomprendida, pero es sin duda un tremendo avance, el mejor de lejos de esa trilogía inicial de los RHCP. Da la sensación de que es la primera vez que se tomaron en serio esto de la música, y algo hay de ello, pero hay muchos factores que confluyeron en que este sea un disco único en su discografía, potente, fluido, con una química excepcional entre sus integrantes. Se transmite la camaradería, que disfrutaron la grabación (no que les valiera madres qué salía, como en los previos), y que por fin, guiados por el productor correcto, comenzaban a dar pasos a su sonido propio. Dan la sensación de que con esa alineación también hubieran podido lograr cosas grandes con el tiempo, y si el anterior fue el álbum más Funk de la banda, éste es el que tiene más carga de Rock.

La cuestión con los Peppers es que si primer época bien pudo ser tomada de una SitCom con tintes dramáticos. Eran la oda al desparpajo, y ni la misma EMI sabía qué hacer con ellos. Nadie quería hacerse cargo de esa banda, pero aún tenían contrato, y a pesar de que parecían una mala broma de preparatorianos más que una banda, la disquera les terminó dando un presupuesto de $5,000 dólares para su tercer disco. En lugar de ponerse a trabajar seriamente con ese presupuesto (que era muchísimo, en serio, para una banda como los Peppers entonces), escogieron a Keith Levene como productor. No porque fuera bueno, sino porque también estaba metido hasta las cachas en la heroína, igual que Kiedis y Slovak.  Slovak y Levene tomaron $2,000 del presupuesto para usarlo en drogas, sin consultarlo con nadie, obviamente. Más pronto que tarde, salió a la luz y las broncas casi causan la disolución del grupo. Anthony estaba furioso porque no le habían compartido las drogas, mientras que Cliff Martínez lo estaba porque era el único que decía que ese dinero debía usarse para el álbum. Al final, Cliff quedó marginado y comenzaron a relegarlo, pero no renunciaba, así que Flea y Anthony lo corrieron, alegando que no tenía el corazón en la banda y que había poca química musical. Además, aprovecharon que Jack Irons, el bataco original de la banda, les había avisado hacía poco que estaba disponible. Así que todo se dio para que la formación original con la que surgió el grupo en 1983 por fin pudiera reunirse en estudio.

Y bueno, en el siguiente capítulo de esta tercer temporada de su melodrama RHCP 80’s, parece todo resuelto para la grabación del álbum, pero Kiedis y Slovak estaban es pésimas condiciones por el exceso de drogas. Anthony llegaba prácticamente como sonámbulo a los ensayos y no había manera de hacerlo cantar de manera coherente. Así que le dieron un ultimátum: O se limpiaba o dejaba la banda. Parece que Kiedis no tenía intensión de dejar las drogas, pero sorpresivamente el LA Weekly nombró a los Peppers como “La Banda del Año” y de alguna forma eso motivó a Anthony a intentarlo con Cold Turkey, es decir, así de golpe y con puros huevos. Así que voló a Michigan para pedirle ayuda a su madre. Cuando lo vio en el aeropuerto, lo vio en tal estado, que ni siquiera hicieron escala en su casa, lo llevó directo a la clínica de rehabilitación Salvation Army. Se supone que de inicio intentó escapar y no entendía lo que le sucedía, pero tras unos días entendió el programa y que la gente estaba tratando de ayudarlo, por lo que empezó a cooperar. Hay que considerar que Kiedis no había pasado un día sin drogas prácticamente desde los 11 años. Anthony salió limpio tras 20 días en la clínica, con un montón de ideas y una lucidez y energías increíbles. En el vuelo de Michigan a L.A. escribió “Fight Like A Brave” y de inmediato reunió a sus compañeros para empezar a grabar.

Afortunadamente Flea y Jack se dieron cuenta de que Keith Levene no iba a funcionar más que como compañero de juerga, así que lo mandaron a volar para salvar el poco presupuesto que tenían. En ese tiempo estuvieron practicando y puliendo esa sección rítmica. No tardaron ene encontrarse nuevamente, ya que a pesar del tiempo, seguía la química y se conocían muy bien de los inicios del grupo. Irons es buen baterista, mucho mejor que Cliff Martínez, Aun mejoraría después, con unos fulanos de Seattle llamados Pealr Jam, pero ya aquí daba mucha más solidez y potencializa el virtuosismo de Flea. En fin, en EMI estaba un aspirante a productor llamado Michael Beinhorn, y como nadie más quería trabajar con ellos, le asignaron como primer proyecto el tercer disco de los Peppers. Beinhorn quedó con el ojo cuadrado cuando oyó los primeros dos discos, y lo mejor que atinó a decir es que era una “Música muy abstracta”. Pero les dio el beneficio de la duda, y se sentó a platicar con ellos antes de aceptar. Le intrigaba saber porqué la misma disquera parecía esforzarse de que el grupo no lograra el éxito. Anthony estaba más lucido que nunca, y a Beinhorn le gustó que su actitud, y que no parecían conformistas, además de esa aura de rebeldía. Lo primero que hizo fue averiguar por qué diablos el LA Weekly los nombró como la banda del año, por lo que fue a verlos en vivo y se dio cuenta de que era una banda totalmente distinta. En el escenario eran una máquina, mucho más potente, creativa, que se daba tiempo de improvisar, pero sobre todo, desplegaban una energía brutal. Sobre todo esa nueva-vieja alineación, que ya se conocía a la perfección de años y que sabían que iba a hacer el otro sin necesidad de hablarse. Así que quiso que el nuevo álbum retratara esa banda. Al aceptar, Kiedis le pidió como condición que quería el disco grabado en solo 10 días y que las rolas serían escritas en el transcurso de las sesiones. Michael aceptó, pero con la condición de que fuera un sonido lo más “en vivo” posible.

Así, todo parecía miel sobre hojuelas cuando empezaron a grabar en el sótano de Capitol Records. Qué podría salir mal? Nada. O casi nada. Como celebra un drogadicto rehabilitado que por fin llegó a sus primeros 50 días limpio? Pues drogándose! Anthony tenía planeado que fuera una sola vez para celebrar su sobriedad, pero pues obviamente cayó redondito. Las grabaciones se comenzaron a estancar porque Kiedis se largaba a buscar heroína. Pero le llegaba la culpa y regresaba a las sesiones con una letra nueva, dedicada a sus compañeros o a las experiencias que habían vivido. Aunque se molestaban con él por largarse, lo perdonaban porque estaba en un periodo creativo increíble. Slovak ayudó a Anthony a grabar algunas de las partes vocales y el disco comenzó a cobrar forma. Beinhoprn a veces se tenía que portar como una nana en kínder, pero tras los primeros 5 días, empezaron a escuchar los resultados y se dieron cuenta de que les estaba ayudando a producir su mejor material hasta entonces. Un ejemplo es “Behind The Sun” que empezó como un riff al aire de Hillel mientras esperaban a que regresara Anthony. Beinhorn lo grabó porque le encantó y le pidió que siguiera trabajando en él. Jack y Flea se incorporaron, y aunque se sale de los estándares de lo que normalmente hacían, terminó siendo la mejor rola del disco. Tras finalizar el décimo día, Slovak lanzó su guitarra y comenzó a correr en círculos diciendo que el TUMPP era la cosa más hermosa que jamás hubieran hecho.

En ese punto tenía razón. Con Irons en la batería, la sección rítmica luce mucho más. Flea quizá suena un poco más contenido, pero es que en realidad él tenía casi toda la carga musical de los dos discos previos, y por momentos sonaba abrumador. Aquí la parte creativa está más distribuida. Kiedis sigue lejos de su mejor nivel, pero suena más entendible y por momentos más melódico. De repente cae en esos vicios de atropellar las letras al rapear, pero es su mejor trabajo en esta primera época. La guitarra de Slovak tiene mucha más presencia y fuerza que el disco anterior, y pareciera que la sección rítmica trabaja para el lucimiento de la guitarra. Un fan adolescente de la banda, de hecho, desmenuzaría nota por nota lo creado por Slovak en este disco para crear su propio estilo. Un fan llamado John…

 

El disco arranca con “Fight Like a Brave”, con un riff potentísimo, cargado de distorsión y con una intensidad que le patea el trasero a cualquier banda de glam metal de la época. Además de simple y pegajoso. De entrada se nota que se lo están tomando mucho más enserio. Flea suena más contenido, al menos en los momentos en que entiende que la guitarra es la protagonista, aunque después se discute con arreglos y un minisolo slapeado. Irons luce también sobrio, combinando bien con Flea, pero sin acaparar reflectores. El estribillo es pegajoso como chicle, con toda la banda cantando a coro: “Fight like a brave, Don't be a slave, No one can tell you, You've got to be afraid” y es imposible no terminar cantando con ellos, o al menos tarareando. Luego un solo de Slovak, que no es un Hendrix, pero imprime mucha energía y potencia, luciendo más en esos instantes que en todo en disco previo. Se nota además que sería una influencia enorme en Frusciante. Las letras las escribió Anthony después de que Flea por fin aceptó que regresara a la banda después de su desintoxicación. EL título llama la atención porque “Pelea como valiente”, se refiere a cuando debes pelear aún cuando sepas que la lucha está perdida. La melodía mejora también, aunque no soy muy fan del rap. En sí, esto es lo mejor que les hemos oído hasta ese momento. Por cierto, esta canción sería su último playback en TV hasta el Superbowl del 2014, con la peculiaridad de que mientras la “tocaban”, terminaron desbaratando todos los instrumentos al mas puro estilo The Who.

Luego está “Funky Crime”, con acordes disonantes abriendo, que recuerdan vagamente lo que harán después en “Aeroplane”. Al :10 un parón y regresan con un ritmo más funky. El estribillo es muy raro, con Kiedis payaseando un poco y la guitarra de Hillel retomando poder. Luego le agrega un wha rarísimo que tiene efecto de voz robótica. Flea va marcando el ritmo y se compenetra muy bien con Jack, ambos haciendo slaps y fills alternados. No es un clásico, pero se nota también avance, y que el estilo de rasgueo rápido de Slovak será crucial a futuro.

Enseguida llega “Me and My Friends”, una verdadera aplanadora, en la que esta vez Flea lleva el liderazgo con un imparable bajeo que no da un solo respiro. Desde el inicio disonante en bajo que se va directo al estribillo en el que de nueva cuenta, todos cantan para una atmósfera festiva y poderosa. Luego los versos, con otro figurón de Flea mientras Kiedis rapea a toda máquina, aunque un poco más entendible. Las letras hablan de la banda, dedicando versos a cada uno. El solo es incendiario, Slovak lleva un papel discreto la mayor parte de la rola, entendiendo que es el momento de Flea y de Jack , quien también se discute con una batería demoledora. Pero al 1:30 hace quizá su requinto más poderoso, con tintes hendrixianos, muy rockero. Al minuto 2 tenemos un puente instrumental en el que la sección rítmica hace un excelente arreglo creando tensión y dejando a Hillel jugar con los armónicos, un poco más discreto. Cierran con una escala ascendente que queda como en puntos suspensivos. No será un clásico, pero es de las mejores de esta etapa inicial y la siguen tocando de vez en cuando.

“Backwoods” es otra canción muy rocker, con el slapeo de Flea dominando, pero la guitarra de Hillel con mayor presencia, además de otro buen solo. El coro no difiere mucho de los versos, y la melodía-rapeo de Anthony es más genérico, aunque al menos en la sección media lo hace con intensidad. La letra es un repaso a los inicios del Rock, mencionando y rindiendo tributo a figuras como Chuck Berry, Bo Diddley, Little Richard, Howlin’ Wolf, lo cual es raro considerando su mayor influencia funk y rap.

“Skinny Sweaty Man” habría pasado como una de sus bromas kitch pasables en los discos previos, pero aquí suena como un retroceso. Es básicamente un riff de bajo, bueno y rápido, pero repetitivo, sobre el que basan toda la rola. Ruidos raros, voces de ardillita que eran cliché de la época, un rapeo indescifrable. La letra es para Hillel, si han visto fotos de lo delgado que estaba por no comer en lugar de inyectarse, entenderán. Lo único salvable acaso es la implacable batería de Jack Irons, pero aún así es de los puntos “flacos” del disco. Ja!

Afortunadamente llega “Behind The Sun”, que debe estar entre sus mejores rolas, no de este disco, no de esta etapa, sino de toda su discografía. Es una muestra de gran balance del grupo, en el que distribuyen el lucimiento instrumental. Flea arranca con esa escala descendente. Slovak hace ese ritmo que se sale de la influencia Funk para tener matices más Reggae, e incluso se anima a meter un sitar sobre el peculiar rasgueo. Irons con un beat consistente, dando cohesión y fuerza a esta especie de balada. Surgió con Slovak tratando matando tiempo mientras regresaba Anthony en una de sus escapadas por drogas. A Beinhorn le gustó, y los incitó a armar una canción. Se salía de los estándares, al ser mucho más melódica y suave, pero es uno de los primeros atisbos del sonido más maduro al que se dirigiría la banda poco después. Hillel le ayudó a Kiedis doblando la voz, por ello un efecto doble y cavernoso. Por cierto, Kiedis apenas rapea un par de líneas aquí. La letra es igual de psicodélica que el sitar, narrando una conversación con un delfín. Sí, con un delfín, pero resulta linda. Me imagino el viajesote que traían. La canción se volvería un tremendo trancazo, y podría considerarse el primer verdadero clásico de los RHCP, aunque no la tocan en vivo.

Y después del mayor acierto, viene la peor metida de pata. “Subterranean Homesick Blues” es una versión kitch del tema de Dylan. La destrozan por completo, en uno de los peores covers de la historia. Pudieron al menos improvisar otra letra. La línea de Flea no es mala, pero otra vez es repetitivo y el rapeo es muy genérico. No tiene nada que ver realmente con el espíritu de la versión original del buen Bob…

El disco ya no se recupera realmente a partir de aquí. “Special Secret Song Inside” es otra canción genérica de desmadre, que al menos no es tan fastidiosa como “Mommy, WHere’s Daddy”, pero retoma matices, como las voces femeninas. Lo más interesante de ella es que originalmente se iba a llamar “I Want To Party On you Pussy”, pero EMI detuvo cualquier avance en el disco hasta que cambiaran el título. Así que lo cambiaron, pero no la letra, que hace una especie de guiño a esa melodía sugestiva del estribillo.

Después viene “No Chump Love Sucker”, en la que todos suenan muy encabronados. De hecho suenan más Punk que Funk. Por ahí hay una escala descendente en el puente que suena muy bien, pero en general es  otra canción de desmadre que tenía cierto potencial.

"Walking' On Down The Road” tiene otra gran intro de bajo que luego se conjuga con una guitarra muy blues-hardrockera. Los Peppers haciendo Hard Rock??? No precisamente, pero es quizá lo más cercano. La rola tiene cierta oscuridad, nuevamente cantan a doble voz y en los estribillos se une toda la banda para dar más potencia. Un requinto riff con wha que crea un efecto alucinante, creando además un gran requinto al minuto 2. Se escucha rara para ser de los RCHP, y si uno la escucha en la radio sin ubicarla, sería imposible decir que es de ellos…

Enseguida está “Love Trilogy”, que inicia con un bajo minimalista (!), nuevamente más cercano al reggae. Irons se incorpora con unos suaves platillos mientras Kiedis intenta sonar sensual (?). La rola va subiendo de intensidad, hasta que al minuto los slapeos, guitarrazos, y platillazos de Irons hacen crecer la rola con una gran tensión. Para el 1:30, ya vamos a toda máquina y es difícil de creer que sea la misma canción con que empezamos. Es un jam, sin estructura verso-coro en forma, y se nota a todas vistas que fue hecha en estudio, pero es notable como manejan ese gigantesco crescendo. Kiedis decía que no trata de un trío sexual, pero… le creen???

El disco cierra con “Organic Anti-Beat Box Band”, otra rola de desmadre, con mucha actitud,  estribillos gritados a coro y otra gran línea de Flea. Es perfecta para brincar en los clubes de los 80’s, pero realmente algo genérica, similar a lo que hacían en los discos previos nomás para hacer desmadre. La diferencia es Hillel, que con los guitarrazos le da una gran intensidad a la rola, aunque el solo del final tampoco parece tomárselo muy en serio.

 

En fin, sin contar la portada y sin que sea un discazo, fue un enorme avance para los Peppers. El reunir en estudio al fin a la alineación original parece que los liberó y expandió su sonido. Cuando se ponen serios hacen cosas muy buenas, incluyendo matices de Western, de Metal, de Psicodelia!!! Slovak liberado al fin, prometía bastante, con algunos solos incendiarios y con mucha dinámica y variedad en la guitarra. Además, hay que considerar que fue grabado en sólo 10 días!!!! El problema es que a pesar de tener 4 rolas muy buenas, las demás siguen de genéricas a pésimas, sobre todo en la segunda mitad, que se cae bastante.

El final de esta tercera temporada de “The Red Hot Chili Peppers, 80’s Edition”, terminó mejor de lo que todo mundo esperaba, incluyendo a sus protagonistas, que iniciaron esta serie casi como payasos improvisados. La crítica por fin los volteó a ver, lograron entrar en las listas con “Behind The Sun”, y EMI pudo tomarlos en serio por primera vez, lo cual evitó que cancelaran la “cuarta temporada”, que se llamaría Mother’s Milk. Todo pintaba muy bien para nuestros héroes… Sin embargo, aun celebraban el lanzamiento del disco cuando la historia tomaría tintes trágicos. Pero eso lo veremos más adelante.

Por Corvan

28/Feb/2014

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